Feliz 18 de septiembre
El 18 de septiembre de 1810 Chile dio el primer paso para obtener su independencia definitiva del dominio español. A las 09:00 horas de ese día, cerca de 450 vecinos –en su mayoría jefes militares, cabezas de las familias aristocráticas y prelados de las órdenes religiosas- se reunieron en el salón de honor del edificio del Consulado para discutir cómo debía ser gobernado el país luego de que Napoleón tomara cautivo al Rey Fernando VII y en su lugar pusiera a su hermano José Bonaparte.
El primero en tomar la palabra fue el octogenario gobernador don Mateo de Toro y Zambrano y Ureta, quien renunció a su cargo diciendo: “Aquí está el bastón; disponed de él y del mando”. Luego habló José Miguel Infante, quien hizo ver a la asamblea la conveniencia de designar una “Junta Provisoria de Gobierno” que gobernara mientras el monarca se encontrara prisionero, tal como ya había ocurrido en otras colonias.
La mayoría de la asamblea aceptó la proposición de Infante, manifestando su sentir con el grito de “Junta queremos”. Posteriormente fueron designados los miembros que integrarían el organismo.
Don Mateo de Toro y Zambrano asumió la presidencia de la Junta, que también estaba compuesta por José Antonio Martínez de Aldunate (obispo electo de Santiago), Fernando Márquez de la Plata, Juan Martínez de Rozas, Ignacio de la Carrera, Francisco Javier de Reina, Juan Enrique Rosales, José Gaspar Marín y José Gregorio Argomedo.
La reunión terminó a las 15:00 horas en medio de la alegría de los vecinos de Santiago. Las campanas de las iglesias repicaban, y el pueblo celebró con fiestas y bailes.
Con la designación de una Junta de Gobierno, el “pueblo” de Santiago reconoció y proclamó el principio de la soberanía nacional. Sin embargo, la verdadera independencia de Chile se logró ocho años después, el 12 de febrero de 1818, cuando Bernardo O’Higgins firmó en Talca el “Acta de Juramento de la Independencia”.
Marcela Medina Adán
Comunicaciones FENARO